Heroes Ardiendo

 

   Orik se alejaba por el pasillo tras habernos contado todo lo que sabía, marchaba salvando su vida y habiéndose quitado un gran peso de encima, según su información dos peligrosos perros infernales nos esperaban en el templo de Malar, pero antes de ir a por ellos decidimos investigar las habitaciones aledañas que resultaron ser dormitorios vacíos.

   Era el momento de hacer frente a las criaturas del averno, entramos sin miramientos en el templo una gran estancia llena de dibujos y relieves en las paredes donde se representaban escenas de diversas aberraciones matando, mutilando y comiendo cuerpos humanos, al fondo una gran estatua de una mujer embarazada sosteniendo un kukri en cada mano y un pequeño altar, los perros guardaban la estancia y nada mas vernos se lanzaron al ataque, el grupo de héroes rápidamente acabó con uno de los canes, pero el que seguía vivo lanzó un extraño aullido que resonó en toda la estancia y en el interior de la mente de los aventureros, Thorik y Stolas corrieron sin pensarlo salvando sus vidas, pero Dorkas y Glin se mantuvieron firmes ante la bestia enfrentándose con valor a ella.
   Una vez terminado el combate y vuelto a reunirse el grupo buscaron en el templo y descubrieron que en el altar se hallaban los restos del padre Ezakien Tobyn, los cuales habían sido quemados y ofrecidos como ofrenda a Malar, era un sacrilegio horrible lo que allí se había cometido, Thorik recogió con sumo cuidado los restos de Tobyn y llegó a la conclusión de que aquellas mazmorras eran mucho más peligrosas de lo que se pensaba, debían descansar y volver con energías renovadas, al salir recogieron a Lyrie para entregarla a las autoridades de Cala Arenosa y marcharon con la intención de volver al día siguiente.

 

 

   Con los primeros rayos del sol llegamos a Monte Cardo, bajamos al subterráneo dispuestos a erradicar el mal que amenazaba Cala Arenosa de una vez por todas. Bajamos varios metros y empezamos a notar como el suelo se inclinaba levemente, una puerta de piedra con grabados de cofres y gemas preciosas nos daba paso a un pasillo donde cuatro estatuas que representaban a un hombre con un libro y una clava dominaban la estancia, Stolas dio un paso al frente y la baldosa cedió levemente bajo sus pies, varios barrotes bajaron del techo encerrándolo en el sitio, dos de las estatuas que se encontraban a cada lado emitieron un chasquido y golpearon con fuerza, por suerte el arquero pudo esquivar los dos golpes a pesar del estrecho espacio en el que se encontraba, Thorik intentaba ayudar tras los barrotes, pero un segundo chasquido volvió a activar el mecanismo y esta vez las dos estatuas acertaron a Stolas, Dorkas apartó al enano y empezó a tirar con fuerza de uno de los barrotes, Stolas hizo lo mismo y así consiguieron quitar una de las barras por las que rápidamente se coló justo en el mismo instante en que se abría una trampilla bajo sus pies. Había estado muy cerca de caer al vacío, la trampa volvió a su posición inicial, cerrándose la trampilla, abriéndose la celda y las estatuas de nuevo inmóviles.

 

 

   Los aventureros continuaron investigando el lugar, llegaron a una sala donde lo más llamativo era una columna hecha en su totalidad por miles de monedas de oro, era evidente que era otra trampa mortal para embaucar a los exploradores codiciosos y pasaron de largo. Al final de la habitación había una doble puerta cerrada que estaba adornada por un relieve donde dos esqueletos con grandes martillos golpeaban y machacaban un cráneo, estás imágenes les hicieron sospechar que algo importante se ocultaba tras la puerta, así que dieron marcha atrás explorando otra habitación. Al abrir la puerta una gran sala llena de estanterías de mármol rojo, mesas llenas de papeles, libros, recipientes y demás artilugios se abría ante ellos y en el medio acompañada por otro can infernal, una joven de una gran belleza, con su vientre lleno de cicatrices, el brazo deformado con un extraño color rojizo les miraba con desprecio y odio, era la primera vez que veían a dicha persona, pero nuestros héroes ya conocían su nombre, Nualia.

 

 

 

   Thorik y Glin lanzan sus conjuros a Dorkas, cada paso que da la bárbara va aumentado su tamaño poco a poco, sus músculos se tensan mientras aprieta con fuerza el alfanje en dirección al perro que acompaña a Nualia, Dorkas levanta su arma y lanzando un feroz tajo contra el perro lo parte por la mitad de un solo golpe. Nualia contraataca golpeando con su espada a Dorkas que resiste el ataque, el combate termina con dos flechas que se clavan en el cuerpo de Nualia. Nuestros héroes lo han conseguido, el mal que se cernía sobre Cala Arenosa había sido vencido, investigan la habitación antes de interrogar a Nualia que yace inconsciente sobre un charco de sangre y así descubren su triste historia.

 

 



 

 

   La infancia de Nualia en Cala Arenosa había sido muy difícil debido a su condición de medio celestial, su extraña belleza alejó a los otros niños de ella mientras que los adultos pensaban que había sido bendecida por Selune lo que causó una cantidad exagerada de peticiones supersticiosas a la niña por parte de los habitantes del pueblo llegando a la humillación física y mental convirtiendo a la pobre Nualia en un monstruo de feria. Su padre Tobyn quería consagrarla a Selune y la educó en una estricta moral religiosa pensando en un gran futuro para ella.

   El tiempo pasó y Nualia era muy infeliz, pero su vida dio un giro cuando conoció a Delek Viscanta un joven que la cortejó y del que ella quedó prendada pues era la primera vez en su vida que recibía amor sin ningún tipo de condición. Mantuvieron su relación en secreto por temor a las represalias de su padre, pero la felicidad de Nualia duró poco, al quedar en cinta Derek mostró su verdadero carácter y la bandonó, Ezakien Tobyn se enfadó tanto al enterarse de la noticia que encerró a Nualia en la Iglesia y le prohibió salir fuera hasta que diera a luz, el odio y la rabia fueron apoderándose poco a poco de Nualia. Varios sueños la atormentaban durante la noche, en su sexto mes de gestación soñó que bajo el pueblo un extraño templo se ocultaba, en él un pozo la llamaba y atraía como la luz de una llama atrae a una polilla, el dolor la despertó se encontraba frente al pozo su vientre abierto, hecho girones y frente a ella un rastro de sangre donde se hallaba un monstruoso recién nacido, extrañas comadronas a su alrededor recogieron la aberración del suelo, ellas se harían cargo de dar muerte a la desdichada criatura recién nacida y devolverían a Nualia a su casa sana y salva.

   La pobre chica no pudo soportarlo más y durante varias semanas entró en un coma profundo en el que sueña con Malar y ésta le habla. Al despertar Nualia es otra, sabe lo que tiene que hacer, encierra a su padre en el dormitorio e incendia la iglesia mientras huye hacia Riscorbo.

 

  

   Nualia se une a un extraño grupo llamado el culto de los despellejadores asesinos, adoradores de Cyric donde su rabia sigue creciendo, junto a ellos encuentra a Delek y lo mata con sus propias manos, pero su sed de venganza no se sacia, hay más culpables y todos deben pagar. Guiada por la líder del culto quien le hace entrega a Nualia de un medallón de 7 puntas vuelve en secreto a Cala Arenosa, al templo subterráneo donde dio a luz aquella monstruosidad, allí conoce a la demonio Erilion con la que estudia y planea la destrucción de toda la ciudad y de todos sus habitantes. Mientras Nualia reúne los recursos necesarios para llevar a cabo su venganza, tiene la visión de un gran lobo goblin, que responde al nombre de Malfeshnekor, sabe que si lo libera tendrá la venganza que siempre ha querido y mucho más, pues Malar la recompensaría con la liberación de su mancha celestial que siempre ha tenido y se convertiría por fin en que lo que siempre ha sido, un monstruo.

 

 

   Nuestros héroes no pueden más que sentir lástima por Nualia, la despiertan y dejan que hable, la medio celestial dice sus últimas palabras y recibe la paz que siempre ha anhelado.

 

 

   Solo queda por descubrir la habitación tras la puerta de esqueletos amenazantes y para su sorpresa es una simple sala llena estatuas, la misma escultura de un hombre portando un libro y una clava nada más. Pero antes de abandonar aquel malvado lugar Glin se queda observando la columna llena de monedas de oro, nos tememos lo peor por su condición de gnomo, pero lo que Glin descubre es que en la columna falta una moneda, que aquello puede signifcar algo y efectivamente cuando colocan una moneda en el hueco, la columna se desmorona llenando la habitación de monedas y hundiendo al grupo en ellas, al instante todas las monedas desaparecen y ante ellos se abre una nueva sala donde descubren dos habitaciones, en una de ellas una imagen en bucle de un hombre repitiendo un mensaje una y otra vez: " Su ira no es comparable a mi fuerza...Están encima nuestra..." Ecos de un antiguo conjuro de comunicación tan potente que tras miles de años sigue resonando en estas paredes, es aquí donde encontramos una llave con forma de estrella de siete puntas, llave que sirve para abrir la última puerta de la estancia. Con tranquilidad Stolas usa la llave, al abrirse la última puerta un fuerte olor a azufre inunda todo el lugar, en mitad de la habitación un pozo de fuego arde con intensidad y tras las llamas un horrendo ser cuadrúpedo, con manos en sus patas delanteras, rasgos de murciélago y goblin nos mira con extraña calma, sonrié y se lanza hacia nosotros.

 



 

 

   Dorkas golpea con fuerza, pero sus ataques no parecen afectar a la criatura, las flechas de Stolas rebotan en el demonio, Thorik mantiene con vida a Dorkas con todo lo que tiene, mientras que Glin invoca esferas de fuego que la criatura parece ignorar. Los héroes tienen un serio problema y por primera vez se ven sobrepasados, sus instintos hacen que retrocedan poco a poco, pero justo cuando Dorkas va a dar su último paso hacia la puerta una garrra se clava en su pecho y cae al suelo, Stolas tira de ella con toda su fuerza mientras Thorik cierra la puerta, usa la llave de siete puntas y todos corren, él también empieza a correr, nada los persigue, no se escucha nada, todo permanece en un inquietante silencio.

 

   A salvo en el pueblo, blancos y exhaustos tras la huida, los héroes de Cala Arenosa curan sus heridas y meditan que hacer con el demonio de Monte Cardo, necesitan mejores armas, necesitan mejores conjuros. Transcurren dos días en los que Dorkas se hace con un alfanje mágico, Stolas encanta su arco para hacerlo más mortífero, Thorik recita cantos de batalla invocando el poder de Moradin y Glin estudia el libro de magia de Lyrie buscando nuevos hechizos. Tras esos dos días de planificación ha llegado la hora de enfrentarse al demonio.

 



 

 

 

      Al abrir la puerta de nuevo Dorkas entra con la protección de Moradin, convertida en una auténtica sierva de Gárganos y lanzándose a la que posiblemente sea su última batalla, en el interior de la habitación el demonio los espera sabe que volverían, pero su aspecto ha cambiado su rostro se parece a Dorkas y su tamaño parece también mayor todos entran con el mismo grito de batalla, saldrán de allí vivos o morirán juntos en el combate, el demonio retrocede para su sorpresa y su imagen se difumina, ahora es mucho más difícil de golpear, pero Thorik invoca un martillo, el Martillo de Moradin que golpea constantemente a la criatura, pequeñas luces zumban y explotan en el adversario, Glin utiliza constantemente su varita sin cesar, Dorkas hace de escudo humano intentando acertar con su arma, pero la bestia es muy poderosa sus garras y mordiscos no fallan nunca, al contrario Stolas no acierta con sus flechas, la balanza se inclina en favor del demonio más la suerte está de parte de los héroes, la bestia tropieza y cae al suelo en ese momento Dorkas golpea con toda su furia el demonio no cae, pero ahora está gravemente herido un último golpe del Martillo de Moradin y el demonio Malfeshnekor cae muerto. Tan sorprendidos como agotados los héroes gritan y claman que por fin han vencido a las fuerzas demoníacas, el monstruo ha caído y ellos han vencido.

 

 



 

 

  Es de noche en Cala Arenosa, nuestros héroes duermen en el Dragón Oxidado, una inquietante sensación despierta a Thorik algo le está agarrando, una extraña criatura con cabeza de esqueleto y cuerpo de niño le muerde en el brazo, al grito de despertad golpea al monstruo comenzando una lucha en la habitación, el combate dura poco y el ser ha muerto, todos comentan cómo o qué ha podido pasar, menos Thorik que está callado, quieto mirando los restos sobre el suelo, cuando el grupo se percata de ello miran al enano y éste alza la vista y les dice que esta criatura solo aparece en contadas ocasiones portando un siniestro mensaje, pues es la avanzadilla de una horda de no muertos.