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Mostrando las entradas etiquetadas como Forlobster Realms

La Reina Hundida

  El apodo y el estado del cubil de Ileosa son mas que adecuados a la situación en la que se encuentra la falsa monarca: La Reina Hundida. Después de estudiar los alrededores, decidimos usar el factor sorpresa y colarnos mediante la magia de Bensa, que se queja de una frontera invisible y que Morgana tumba con su poder. Aparecemos en una sala diáfana, imponente. Las dimensiones de las ruinas de eso que algunos rumores a media voz de eruditos llaman Thassilon son impresionantes: ¿para qué necesitaban todo este espacio vacío? ¿fue una demostración de poder, o hay algún motivo oculto perdido a través de los siglos?. Posiblemente nunca obtengamos esas respuestas en nuestro tiempo. Sacudo la cabeza y nos disponemos a explorar esta pirámide. Empezamos preparándonos para la exploración bajo el agua, donde nos encontramos con un antiguo y enfadado habitante. Desde luego, Ileosa sabe que debe protegerse y para ello ha hecho una selección de lo que ella cree que será un desafío para nosotros...

Un contrato firmado en sangre

Todavía estremecido y notando como mi cuerpo entero tiembla tras alterar mi destino y el de mis compañeros con la maldita baraja, nos disponemos a seguir nuestra búsqueda. Los dioses deben mirarnos divertidos, y hasta la mismísima Tymora pensará que jugamos con nuestra suerte más allá de lo que es razonable. Pero somos los héroes de Korvosa. Exploramos la última planta del Castillo Korvosa, y desde luego la sucia huella de Ileosa se nota en todo. Un absoluto estado de dejadez en todo el castillo, habitaciones a medio reparar, el cubil del dragón hecho por la fuerza, las palomas mensajeras alfombrando una habitación de muerte...y el rastro del hermano del mismísimo Rey tapado de forma torpe y chapucera. Un insulto más a su linaje. Tengo que reconocer que por un momento nos relajamos: hasta que bajamos a la siguiente planta y hace su forzada aparición una oponente de nuestra altura: Kayltanya.  La lucha es cruenta y Kayltanya está preparada de sobra: no tardan Bensa y Morgana en...

Asalto al Castillo Korvosa

Todavía no puedo creer que hayamos acabado con un dragón negro, y más de esa edad y experiencia...con un sudor frío recorriendo mi espalda cuando recuerdo como sus piel hacía rebotar mis dagas aún golpeando entre sus escamas. Los habitantes de Korvosa están tan sorprendidos como nosotros, y poco a poco se acercan para aplaudir nuestra vuelta...es como si se quitaran un velo de los ojos y por fin volviesen a ver Korvosa como siempre debió ser. Pero la realidad apremia, y debemos llevar a Sabina con Cressida cuanto antes. Una vez reencontradas y para bien, nos disponemos a descansar y prepararnos: un viaje al Averno nos espera. Formando un círculo con las manos entrelazadas al que se une Sabina y gracias a la magia de Bensa, llegamos a un lugar al que desde luego espero volver nunca. El mismísimo Averno con su río Styx y su afluente, el Río Sangre. Tras unas horas que se me antojan semanas, por fin encontramos a Iru. Parece apesadumbrada, desesperada, como si poco a poco la maldad del Av...

Extinguiendo la maldición de Muro Cicatriz

Las puertas del oneroso e impresionante templo a Loviatar se abren ante nosotros. El símbolo del látigo de nueve colas se parte por la mitad cuando la enorme puerta de doble hoja nos deja paso sin hacer el más mínimo ruido.  Entramos a una especie de recibidor, que me da por bienvenida al posar el primer pie dentro del templo un grito ensordecedor en mi mente y un golpe inmaterial que me arroja al patio como un guijarro arrojado por una cría goblin. Sacudiéndome el polvo y aguantándome el dolor en las costillas, le pido a Bensa que sea ella quien rompa la barrera mágica, no sin antes curarme. El templo está bien guardado, nos encontramos tanto con un elemental de agua como con los espíritus torturados de varios clérigos de Loviatar que se suicidaron dentro del templo, entendemos que ante la desesperación en la caída de su líder. Desde luego el lugar es tanto o más siniestro incluso de lo que esperábamos, con una despensa dedicada a órganos de humanoides encurtidos para un gusto inh...

El Centro del Mal en Muro Cicatriz

Aún con el cansancio que hace que notemos el peso de nuestros cuerpos y el agotamiento de nuestras mentes, nos disponemos a entrar en un amplio salón dentro de Muro Cicatriz. Encontramos un ser que parece encarnar el Mal, una figura fantasmal encadenada a tres calaveras que se retuerce en una bruma infinita. Para empeorar la perspectiva, cinco fantasmas lo acompañan y están ávidos por consumir nuestra energía vital. La batalla comienza: Bensa lanza oleadas de luz divina, Morgana hostiga a nuestros enemigos con olas de conjuros e Iru y yo adoptamos nuestras tácticas de combate. No es fácil la batalla y cuando termina Ir está hecha una sombra de lo que fue, con la piel mortecina y sin voz ni expresión en su cara.   Nos tomamos un pequeño respiro para curarnos e inspeccionar el salón cuando, para nuestra desesperación, el espíritu encadenado vuelve a aparecer. "¡Corred, insensatos!" nos grita el conde desde prácticamente fuera del salón. En este caso damos cuenta de sus instrucc...

La sombra fuera del tiempo

Alguien o algo nos está observando. Este sitio me pone los pelos de punta. A pesar del cansancio que vamos acumulando, tengo tantas ganas de salir que me sacudo la fatiga fácilmente con tal de seguir avanzando y terminar con nuestra estancia aquí cuanto antes. El castillo desde luego debió ser impresionante en su época. Las cocinas nos revelan una verdad oscura pero ineludible: todo tipo de seres inteligentes eran aquí bestias para alimento del malvado Kazavon y sus tropas. Ese mal persiste y anima todavía a tres ghouls que se lanzan contra nosotros con hambre por nuestras almas. Este lugar desde luego está maldito. Encontramos vestigios de un pasado oscuro, en el que la elfa Aeilaya descendió a la locura en su odio por la sangre orca, algo que aprovechó el carroñero Kazavon para reclutarla. Tal espíritu maligno parece encontrar siempre lo peor de las almas, como ha hecho con Ileosa.  Alguien o algo nos está observando. Muro Cicatriz está plagada de no muertos. Acabamos con inconta...

La voz de los espíritus

 El campamento Shoanti es un completo caos de fuego y arena. Gárgolas y mantis rojas a un lado hacen su espectacular entrada, los bárbaros de las llanuras se reorganizan al otro, junto a ellos los héroes de Korvosa empuñan sus armas y se preparan para la batalla. Una mantis roja de singular armadura da un paso al frente con los brazos en alto, grita para que todos puedan oirle: -"Honorable pueblo Shoanti, no hemos venido para haceros daño, solo queremos a los extranjeros que se hacen llamar "Los Héroes de Korvosa", no queremos un baño de sangre en esta sagrada tierra, entregadnos a esa escoria que se esconde entre vosotros y nos marcharemos en paz". Krojun se adelanta, mira hacia su pueblo y posa su mirada sobre Variel, Iru, Bensa y Morgana, da un paso al frente y mirando hacia el ejército de mantis rojas que tiene al frente grita: -"Los únicos extranjeros que veo aquí los tengo frente a mí, unos mierdecillas que no saben donde se han metido... ¡A mí Shoanti! ¡...

Nacimiento de cuatro Sklar-Quah

 Las Tierras de la Ceniza contienen muchas maravillas a pesar de su aspecto. Pero sin duda lo que estamos encontrando aquí y de un valor infinito es nuestro destino.  Llegamos a Vado Llama tras un viaje con Akram el Orador de la Verdad para encontrarnos con el Chamán Sol y el caudillo Klar Preparado.  Este Qah no nos lo va poner fácil, y bien que lo dejan claro desde el principio. Los Matadores de Huesos se comprometen a escoltar a Akram, que nos deja solos ante la mirada de Krohum. Sabíamos que tendríamos que decir adiós a nuestro compañero mas pronto que tarde, pero he de confesar que ver al venerable Shoanti alejarse nos inspira algo de melancolía. No obstante, Korvosa espera y sabemos que no lo hará por mucho tiempo. Exponemos al Chamán Sol la necesidad que tenemos de información sobre Kazabom y los Dientes de Medianoche. Con una expresión sombría, acceden a someternos a la prueba del Menhir. Dos días y dos noches aguantando sin dormir, de pie y sujetando nuestro menh...

Lo que el Velo de Sangre despierta

Bensa, como siempre, está ahí para nosotros. Sentimos la bendición de Tymora fluir y liberarnos del Velo de Sangre...con una sonrisa que me saca esta sensación de sumergirme en agua fresca y transparente como la luz de la mañana que debería asomar por la ventana. Esta Korvosa nunca ha recibido luz del todo pura, al menos desde que yo llegué hace ya no pocos años.  La enfermedad sigue su curso, y con ella la peor de las podredumbres: la de la moral de los korvosanos. A pocos metros de la ciudadela Bolchenek encontramos ya panfletos de lo que sin duda es un timo destinado a aprovecharse de los desesperados. Por supuesto acudimos raudos al establecimiento, y con un par de palabras los guardias nos llevan ante la responsable de los cientos de ciudadanos que se agolpan a la espera del remedio: Vendra Loaggri. Está claro que a esta mujer le falta moral...y le sobra encanto. No pestañea ni un solo segundo en toda la sarta de mentiras que nos cuenta. ¡Está poniendo en riesgo cientos de vid...

Variel

La mía no es una historia fácil de contar...es por ello que nunca lo hago. Para entender qué hago aquí en Korvosa, debes saber que mis padres fueron exploradores y mercaderes asentados en el extraño Rashemen. Atraídos por las leyendas y las señales que apuntan al Reino gnomo oculto de Songfarla en las Montañas del Amanecer, partieron en su busca en un viaje arduo y peligroso pero que prometía toda una nueva ruta de comercio de ser exitoso. Pero las Montañas del Amanecer son también frontera con Thay y sus Magos Rojos, de ahí la sabia decisión de los gnomos en permanecer ocultos. Una decisión que no supieron tomar mis padres. No fueron abatidos por los malvados Magos Rojos, no. Fueron capturados y esclavizados. El cautiverio demostró ser más retorcido que cualquier colección de pesadillas: abusos físicos y mentales, experimentos arcanos en los que se pretendía arrancar el espíritu de los elfos para destilarlo en esencia arcana, tareas infinitas con el único fin de causar el divertimento...

Confusión

La rueda del destino gira constante e inmutable.  La rueda continúa girando.  El destino gira, que gira. Rueda que rueda.  Por la corriente del tiempo, bajo las aspas de la vela.  El caos reina por toda la ciudad; incendios en las calles, hipogrifos surcando los cielos, gritos y más gritos. -"¡El fin de los tiempos ha llegado!" -"¡El ojo de Shar se ha posado en Korvosa!" -"¡Muerte a la reina, muerte a la usurpadora!" La situación de la ciudad es similar a la del grupo de aventureras que se acaba de conocer, la amenazadora bárbara nos grita mientras comienza a correr: -"¡He de comprobar algo urgentemente, me reuniré con vosotras más adelante, adiós! ". Los corderos de Lamn han desaparecido también, solo Lunbig permanece con nosotras, por lo que decidimos devolverla sana y salva a su casa. Durante el camino, un loco vocifera a gritos que el mundo se ha terminado, cuando se percata de nuestra presencia, avanza con ímpetu hacia nosotras.  -"¡El ...